Por Luis Javier Bravo Mayor, Madrid, España.
Con la llegada del profesionalismo, los clubes se vieron en la necesidad de incrementar sus ingresos, no siendo suficiente con las competiciones que, en ese momento, se disputaban.
Con la llegada del profesionalismo, los clubes se vieron en la necesidad de incrementar sus ingresos, no siendo suficiente con las competiciones que, en ese momento, se disputaban.
En esos momentos, existían los Campeonatos Regionales, que daban opción a los campeones y subcampeones a disputar el Campeonato de España, más conocido como Copa de Su Majestad el Rey. Quedar eliminado a las primeras de cambio en el Campeonato Regional correspondiente, no era un problema para los grandes clubes, por improbable, salvo sorpresa descomunal, pero si lo era caer eliminado en el campeonato nacional. A partir de ahí había que inventar todo tipo de amistosos y eso, la afición no lo digería fácilmente.
Así hubo que seguir el modelo inglés de la Liga, el cual proporcionaba pingües beneficios a los clubes, además de mantener un calendario estable durante toda la temporada. Pero esto será motivo de análisis en otro artículo.
Así, la primera fecha de la primera Liga de 1ª División vino a disputarse el 10 de febrero de 1929, salvo el encuentro de Santander que se disputó un día después, siendo los resultados estos:
Arenas Club de Guecho - Athletic Club de Madrid 2-3
RCD Espanyol - Real Unión Club de Irún 3-2
Real Sociedad - Athletic Club de Bilbao 1-1
Real Madrid CF - CD Europa 5-0
Real Racing Club de Santander - FC Barcelona 0-2
El primer gol del Torneo de Liga lo logró el "periquito" José "Pitus" Prat. Un jugador del equipo reserva, como casi todos los que jugaron ese partido, pues el Espanyol contaba con una serie de lesionados y sancionados en el primer equipo, como era el caso de los 3 expulsados en la final de Copa, ganada por primera vez y jugada tan solo una semana antes, y que dejó al equipo blanquiazul en cuadro, pues al resto de titulares disponibles, el entrenador Greenwell les dió descanso.
Fue a los 5', casi desde el vestuario, cuando Prat entró no solo en la historia del RCD Espanyol sino en la del fútbol español. Oramas chuta y rebota la pelota en un irundarra dirigiéndose hacia puerta. Prat, oportuno y bien colocado, la recoge y con serenidad plasma el gol en la puerta del Real Unión.
Un grito para la historia. Pero no un grito más, el primero.
Además ocurrieron otros hechos en esa jornada inaugural:
De los 19 goles conseguidos, 5 lo fueron en la 1ª parte y 14 en la 2ª.
Alfonso Olaso tuvo la mala fortuna de introducir el balón en su propia portería por primera vez en la historia de la Liga. Fue el único gol que anotó en Primera División.
Lazcano, del Real Madrid, consiguió la friolera de 4 goles.
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1 comentario:
Excelente Javi, bienvenido al mundo blog.
Seguramente éste será un espacio que el lector disfrutará y podrá aprender cosillas de la historia del fútbol
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